martes, 4 de mayo de 2010

PONIENDOSE AL DIA

Otra vez de vuelta chuteándo sin querer con las catimbas la palangana, mientras pasa por mi guergüero un pedazo de batio con palta. Mucha agua ha corrido bajo el puente desde los primeros borradores que fueron los primeros tanteos antes de que tuvieran su rostro definitivo, sus ropas, su entorno y aquello invisible como su perso.

Otro poco de agua corrió antes de que llegarán por fin a la imprenta, hay que puro preguntar al guionista, el Seba (hizo su apostolado de paciencia) sobre el inpajaritable proceso de trabajo online, dolores de cabeza incluidos.

Otro tanto de agua siguió corriendo antes de comenzar a mover la revista por propia cuenta, al margen de los monopolios de las distribuidoras.

Hoy por hoy se hechó a corre la bola, los Fatales están en la calle (solo en Valparaíso por ahora), en el Caralibro (Facebook) una cuenta se abrió hace poco y la realumbrá en este blog.

En estos tiempos de movidos cambios que dejó tembleque a muchos gallos vamos a echar toda la lechuga a la parrilla… Me propongo para antes del 2012… perdón antes del bicentenario (septiembre) sacar el segundo número de 50 páginas de Los Fatales. El incentivo clave es que la revista sea leída por muchos paisanos (léase comprada) hasta que por fin desaparezcan los paquetes que sirven de base a una mesa falsa ubicada al lado de la puerta (con el mantel encima pasa repiola)

Quiero sin querer queriendo, retomar los temas que quedaron pendientes, como por ejemplo; reseñar las motivaciones que dieron origen a estos particulares personajes, que en más de una ocasión nos van a hacer sentir identificados: Los Fatales. Esto no solo por las veces en que nos vemos metidos en los medios quesos, donde parece que la señora fortuna pasó sin que le alcancemos a agarrar las mechas, también por aquellas ocasiones en que hemos caído al fondo del hoyo y nos damos cuenta que no podemos caer más abajo (obvio), entonces tomamos fuerza de flaqueza haciendo de las tripas corazón, y con ese tremendo órgano latiéndonos en el pecho y en la güata nos damos un impulso para salir adelante y finalmente como dice Carcuro: “¡me pongo de piee!”, es decir nos ponemos de pie para caminar hacia adelante con la frente en alto y la mirada en el horizonte… y caernos a otro hoyo…

2 comentarios:

el rocco dijo...

http://mythica.cl/wp/?p=3310

vean una reseña hecha por la gente de Mythica Ediciones, sobre los fatales

Celezeta dijo...

gracias por tu link y felicidades por tu trabajo. ¡rocco rockero!